Defensores Imperfectos

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La lucha en contra de los errores de la Iglesia de Roma se dio desde muchas ubicaciones. Las iglesias luchaban contra el catolicismo y contra las sectas paganas con sabor a cristiano, y no estuvieron exentas de excesos y errores. Dios siempre ha tenido un remanente en la tierra (Hechos 14:17; Mateo 16:18), y los siguientes grupos se destacaron por su lucha en contra de los errores que entraron en la iglesia de Roma:

Los Montanistas

No eran iguales a nosotros en todo sentido, pero lucharon contra el error; algunos comprendieron errores doctrinales dentro del catolicismo, pero heredaron errores de otras corrientes paganas. Las iglesias en Ásia Menor, desde el siglo II, que enfatizaron la inminente venida de Cristo
y la santidad personal, mientras condenaron el creciente formalismo y mundanalidad en la iglesia oficial. Montano se desvió de la vedad, pero otros lograron salir de muchos errores y establecerse en la sana doctrina. De entre ellos, el miembro más ilustre fue Tertuliano, el gran apologista (siglo III).

Los Novacianos

Desilusionado con la actitud de Cornelio, obispo de Roma (251 d.C.), por readmitir a los “lapsi”, los que habían apostatado de la fe durante la persecución de Decio, Novaciano se declaró a sí mismo el obispo de la verdadera iglesia de Roma. Durante varios siglos sus seguidores eran conocidos por la disciplina rígida y la sana doctrina.

Los Donatistas:

Por motivos semejantes a los de Novaciano, Donato (siglo IV) llegó a ser el líder de la mayoría de las iglesias de África del Norte. Cuando Ceciliano fue nombrado obispo de Cartago en 312, Donato y sus seguidores se separaron de él porque admitía al pastorado hombres que habían entregado las Sagradas Escrituras durante las persecuciones de Diocleciano. Constantino intentó reunificar las iglesias de África del Norte sin éxito. Es entonces cuando Donato tomó la postura en contra de la intervención del gobierno civil en asuntos eclesiásticos. A causa de su creencia que las iglesias bajo la jurisdicción de Ceciliano dejaron de ser verdaderas iglesias, insistió en que miembros de aquellas iglesias fuesen bautizados de nuevo si deseaban unirse a una de las iglesias bajo su influencia. De ahí surgió por primera vez el término “anabaptista” que significa re-bautizador. Los donatistas continuaron hasta la invasión de los mahometanos en el siglo VII.

Los Paulicianos

Unos creyentes bíblicos de origen desconocido que aparecieron en Ásia Menor en el siglo VII y que llegaron a ser numerosos. Su rechazamiento de toda idolatría les llevó a unirse con los mahometanos fanáticos en destruir todas las imágenes en las iglesias oficiales. La emperatriz Teodora (842-57) les persiguió ferozmente y consiguió matar más de 100.000 de ellos. Un siglo después en otra persecución muchos huyeron hacia Europa llevando consigo un evangelio más puro que tuvo la iglesia oficial. De ellos salieron «nuevos» grupos de iglesias que seguían proclamando fielmente la Palabra de Dios en los Balcanes, Italia y Francia.

Los Cátaros

Del gr. katharós, que significa limpio, puro; sincero, intachable, genuino. Fueron los sucesores de los paulicianos en Italia durante los siglos XI-XIV.

Otra forma de identificar a cualquiera que no siguiera al catolicismo. Esencialmente, el catarismo es la doctrina de los cátaros (o albigenses), un movimiento religioso de carácter gnóstico que se propagó por Europa Occidental a mediados del siglo XI, y logró arraigar hacia el siglo XII​ entre los habitantes del Mediodía francés, especialmente en el Languedoc, donde contaba con la protección de algunos señores feudales vasallos de la corona de Aragón. Con influencias del maniqueísmo en sus etapas pauliciana y bogomila, el catarismo afirmaba una dualidad creadora (Dios y Satanás) y predicaba la salvación mediante el ascetismo (negando los placeres), y el estricto rechazo del mundo material, percibido por los cátaros como obra demoníaca. En respuesta, la Iglesia católica consideró sus doctrinas heréticas. Tras una tentativa misionera, y frente a su creciente influencia y extensión, la Iglesia terminó por invocar el apoyo de la corona de Francia, para lograr su erradicación violenta a partir de 1209 mediante la Cruzada albigense. A finales del siglo XIII el movimiento, debilitado, entró en la clandestinidad y se extinguió poco a poco.

Los Bogomiles:

Los sucesores de los paulicianos en los Balcanes que surgieron hacia finales del siglo XI.

Los Albigenses:

También llamados maniqueos por su dualismo: Dios contra Satanás. Los sucesores de los paulicianos en el sur de Francia. Aunque en un principio fueron protegidos por el conde Raimundo VI de Tolosa, sufrieron una cruel cruzada en el siglo XIII. Sostenían unas doctrinas raras como el dualismo (el dios de luz del N.T. en conflicto con el dios de tinieblas del A.T.; resultaba en el conflicto entre el espíritu y la materia), no prestar juramento, creer que el gobierno humano era perverso y malo.

Los Valdenses

Posiblemente los continuadores del cristianismo primitivo desde los novacianos del siglo IV en la zona montañosa en el norte de Italia aunque algunos fechan su origen desde la conversión de Pedro Valdo de Lyon en el siglo XI. Antes de la Reforma sufrieron tres siglos de terrible persecución de parte de la Iglesia Romana. Luego se unieron al movimiento encabezado por Juan Calvino en Ginebra. Hoy son presbiterianos.

Los Lolardos

John Wyclif, o Wiclef, Wycliff o Wickliffe, conocido en español Juan Wiclef (Hipswell, Yorkshire, c. 1320 – Lutterworth, Leicestershire, 31 de diciembre de 1384), fue un traductor, teólogo y reformador inglés, que fundó el movimiento que se conoce como Lolardos o Wycliffismo, y es considerado por muchos autores, como el padre espiritual de los husitas y, en última instancia, de los protestantes. También, fue una de las primeras personas en realizar una traducción de la Biblia en latín, conocida como la Vulgata, directamente a una lengua vernácula, en este caso el inglés, en 1382. La teología de Wycliff era agustina, creyendo en la elección y predestinación de los individuos, y proclamando la iglesia universal e invisible.​

Los Moravos

Movimiento que surgió en Praga en el siglo XV y luego se trasladó a Sajonia (Alemania) en el siglo XVIII desde donde se convirtió en el pionero de la obra misionera.

La Hermandad de Moravia, también conocida como Hermandad Bohemia, Hermandad Morava, Hermanos Moravos o Unitas fratrum, son una serie de iglesias protestantes, fundadas a través del movimiento husita de Jan Hus, que se inició en el siglo XV en Bohemia (ahora República Checa). En la actualidad, las iglesias moravianas se encuentran repartidas especialmente en Estados Unidos y, en menor medida, en el Reino Unido. Actualmente (2015) suman cerca 825 000 fieles. La iglesia se autodenominaría cristiana, pero no católica, pues, Hus quiso alejarse de lo que sentía como una corrupción en la iglesia, y pretendía volver en la práctica religiosa a las raíces del Cristianismo, las cuales, creía, eran más puras. Esto consistía en que la liturgia fuera en el lenguaje del pueblo, que los cristianos laicos recibieran la comunión tanto en pan como en vino, y la eliminación de las indulgencias y la idea del purgatorio.

Luteranos

Movimiento fundado por Martín Lutero en Alemania cuando comenzó a condenar públicamente los abusos de la Iglesia Católica en 1517. (El Cuestionamiento de Lutero al Poder y Eficacia de las Indulgencias (Disputatio pro declaratione virtutis indulgentiarum), más conocido como Las 95 tesis, desafió las enseñanzas de la Iglesia de Roma con respecto a la naturaleza de la penitencia, la autoridad del Papa y la utilidad de las indulgencias. Esta publicación detonaría un debate teológico que desembocaría en la Reforma.)

¿Y qué tiene que ver los luteranos con los Bautistas? Que los Luteranos tomaron el tema de la libertad precisamente de los anabaptistas, pero a diferencia de estos, aquellos lo usaron con el propósito político y filosófico que desato la Reforma Protestante.

Los Reformados suizos:

Juan Calvino se estableció definitivamente en Ginebra en 1541 como cabeza visible de la iglesia. Bajo su influencia Ginebra abrió sus puertas a recibir refugiados de casi toda Europa. Entre ellos salieron muchos predicadores que volvieron a sus tierras empapados de la doctrina reformada de Calvino. Muchos anabaptistas, como Casiodoro de Reyna, se unieron a este movimiento, pensando en que tendrían libertad y justicia, y en ese sentido son parte de la historia de la Reforma; pero fueron traicionados por los Reformadores y condenados bajo el régimen calvinista.

Hugonotes

Apodo de los calvinistas franceses del siglo XVI. Su nombre se recuerda por la Matanza de San Bartolomé el 24 de Agosto de 1572 cuando comenzó una terrible persecución que cobraría decenas miles de vidas, y de los sobrevivientes muchos huyeron a otros paises buscando refugio. (Después de vivir varios años de guerra de religión entre católicos y protestantes, Catalina de Médicis, la reina madre, concertó el matrimonio de su hija, Margarita de Valois, con el príncipe protestante Enrique de Navarra. Varios miles de hugonotes importantes estuvieron en París para la boda. Seis días después el asesinato de Gaspar de Coligny, protestante muy influyente políticamente, dio lugar a la matanza.)

Anabaptistas suizos:

Movimiento que empezó en Zürich en 1523 cuando Conrad Grebel, Jorge Blaurock, Felix Manz, y unos pocos más se separaron de la iglesia establecida para reinstituir el bautismo de adultos en virtud de su profesión de fe salvadora en Cristo. Zwinglio instituyó cambios dentro de las iglesias de Zürich, pero rehusó cambiar su posición respecto al bautismo de infantes. Los anabaptistas se extendieron rápidamente a Moravia, Alemania y paises Bajos.

Los Menonitas:

Menno Simons, un ex-sacerdote, se convirtió y llegó a ser el líder del movimiento anabaptista en los paises Bajos en 1536.

La I glesia anglicana

Debido a la fuerte influencia evangélica ya presente en Inglaterra, fue relativamente fácil para Enrique VIII convencer a su Parlamento a romper todos los vínculos con Roma y nombrarle «Cabeza Suprema de la Iglesia de Inglaterra en la tierra» en 1536.

Los Separatistas ingleses:

Roberto Browne denunció a la Iglesia Anglicana como imposible de reformar e instó en la necesidad de formar nuevas congregaciones sobre los principios bíblicos en 1582. De las iglesias que se constituyeron según ese patrón bíblico salieron los «peregrinos» para el Nuevo Mundo en 1620 (después de haber ido a Amsterdam).

 Bautistas ingleses:

Aunque había lazos en el principio con los separatistas, el movimiento bautista tiene la distinción de ser la única iglesia en Inglaterra que se constituyó con el bautismo voluntario de creyentes como base de su comunión. Tomás Helwys fundó la primera iglesia bautista (general) en Inglaterra en tiempos modernos en 1612. En 1644 siete congregaciones en Londres publicaron la primera confesión bautista que declara que la inmersión es el modo correcto del bautismo. (Juan Spilsbury, iglesia bautista particular en 1639.)

 Bautistas americanos:

Roger Williams, un sacerdote de la Iglesia Anglicana, fundó una colonia en el Nuevo Mundo por motivos de libertad religiosa. Poco después se convenció de que el bautismo de párvulos era antibíblico y que la forma correcta era por la inmersión. Entonces él pidió al Sr. Holliman, un diácono, a bautizarlo, lo cual hizo, y después Williams lo bautizó a él y los demás que formaban la primera iglesia bautista en el Nuevo Mundo en 1639.

Los Bautistas galeses:

Los bautistas galeses declaran que su origen se remonta a la edad apostólica. Cuando la iglesia romana trató de traer a los británicos bajo su autoridad en el siglo VII, un grupo se lo opuso y luchó en contra. Finalmente para escapar la persecución, se refugiaron en las montañas galeses. Siglos después cuando la colonización del nuevo mundo comenzó, muchos de los galeses bautistas inmigraron allí. En algunas ocasiones iglesias enteras compraron pasaje y todos fueron juntos. Ellos establecieron iglesias bautistas en varias de las colonias, y fundaron la Asociación de Pensilvania en 1706 que llegaría a ser el corazón y el modelo de las iglesias bautistas de la América colonial.

Algunos testigos fieles dentro de la Iglesia Católica Romana:

  1. Arnaldo de Brescia, Pedro de Bruys, Enrique de Lausana, Pedro Waldo de Lyon, Juan Wycliffe de Inglaterra, Juan Hus de Bohemia, etc.
  2.  Algunos fieles españoles: Gregorio de Elvira (ss. 4-5), Prisciliano de Galicia (ss. 4-5), Vigilancio de Barcelona (s. 5), Casiano de Andalucía (s. 9), Claudio de Turín nació en España (s.9), Arnaldo de Villanova (Lérida – s. 13), Casiodoro de Reina y Cipriano de Valera, ambos ex-monjes del monasterio de San Isidro cerca de Sevilla (s. 16).
  3. Erasmo de Rotterdam, quien nunca dejó el catolicismo, pero que por la influencia anabaptista utilizó su conocimiento lingüístico y dejé el Textus Receptus.

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